Recientemente
he visto como en Ecuador ya están construyendo autopistas de seis carriles
mientras en Colombia aun no hemos superado el atraso de 30 años en este tema. Esto me dejo pensando que quizás el gran
problema de este país es la complacencia, la complacencia con los corruptos,
los violentos, los intolerantes, los abusadores y aquellos que por unos pesos
son capaces de hacer lo que sea.
En este país impera la cultura del “vale todo” es decir, no me importan las consecuencias perjudiciales que puedan tener para los otros mis acciones o decisiones siempre y cuando pueda lograr unos pesos de mas o cierto grado de poder.
Un país donde si un político es directo, seco en su forma de expresarse y de gestos duros, es un pésimo político para los medios de comunicación pues no inspira confianza y necesita (según los periodistas) salir del cargo que este ocupando, no importa si este político es serio y honesto (animal en vías de extinción).
Un país donde si el político es de izquierda, y está en un cargo público importante, los medios le dedican ríos de tinta y horas de audiovisuales no con el fin de vigilar su labor sino por el contrario lo hacen con el afán de resaltar y magnificar cualquier error por insignificante que sea, en cambio si es de derecha o del gobierno autoritario de turno así robe, no pasa nada.
Un país donde sus ciudadanos creen en mesías en pleno siglo XXI, quizás producto del caudillismo de más de dos siglos, tanto creen que eligieron a uno por dos periodos y si se relanza de seguro sale elegido en base a una falsa retorica y una intensa propaganda.
Un país donde ese mesías, muy al estilo de los nazis de la segunda guerra, a punta de propaganda logra convencer a la mayoría de la población que los problemas de violencia e inseguridad habían desaparecido para siempre, cuando la realidad era otra, solo que no la querían ver.
Un país donde se volvió lamentable costumbre la “moda” de los “paseos millonarios” en donde el malo es la victima pues “dio papaya” y no el delincuente que tiene como modo de vida el jugar con la integridad y quitar los ahorros de los demás.
Un país donde para reparar, construir o adecuar un puente en una vía principal que usa para exportar el 80% de sus mercancías, demora en construcción más de 3 años y al cabo del tiempo o queda mal hecho o se requieren adiciones presupuestales.
Un país donde se confunde calidad con cantidad y cobertura con hacinamiento en el tema de la educación.
Un país donde algunos mandatarios regionales no saben ni leer ni escribir!!
Un país donde existe algo llamado “paseo de la muerte” una modalidad de las EPS privadas para evitarse sobrecostos rechazando a seres humanos moribundos enviándolos a otras sedes u hospitales hasta que mueren.
Un país donde las cárceles ni representan castigos ni constituyen centros de rehabilitación, por el contrario, es de los pocos países del mundo donde muchos de los presos viven mejor que los guardianes dentro de las mismas cárceles; en donde se comenten mas delitos desde las mismas prisiones que desde fuera de ellas. En donde las ciudades que albergan prisiones sufren las consecuencias de la delincuencia que acompaña el preso de turno.
Un país donde una ciudad capital y puerto tiene peor servicio de agua que muchos pueblos pequeños de otros países.
Único país de Suramérica con dos costas y la capital esta a mas de 1000 kilómetros de cualquiera de las dos.
Único país con atraso en puertos y aeropuertos de 40 años.
Un país donde una sola ciudad ha sido capaz de contaminar el rio más importante.
Con todos los recursos del mundo y con la mayor desigualdad de toda América.
Un país sin
memoria, un país donde la gente solo vive del momento presente y juzga todo lo
que pasa y a todo el mundo por los acontecimientos del día y no tienen en
cuenta lo pasado.
Un país donde la gente muere por saber lo que hace el vecino solo para joderlo y cuando este necesita de ayuda ni se aparece.
Un país donde te roban enfrente de todo el mundo y nadie hace nada.
Un país donde dejan tirados a recién nacidos en el monte a diario, este es un país condenado a la ignominia por siempre, un país con el más grande de violador de niños del mundo y la historia condenado a una irrisoria pena y ahora esta convertido en pastor evangélico y anda convirtiendo a los pecadores de la prisión!! Y le quiere predicar a los niños!!.
Un país con el mal de la autenticatitis aguda, pues sus ciudadanos desconfían tanto de cada uno de sus congéneres que recurren a notario a autenticar todo y aun así salen estafados y tumbados pues la autenticada no es en realidad garantía de nada.
En fin un país
vuelto nada, un pais de locos....